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Esto no tiene efectos sobre otras actualizaciones en el resto del sitio Chile: Breve Imaginería política, 1970 - 1973
Nombre |
Decreto |
Años condena |
Lugar |
Año fin condena |
Gómez Peña, Hugo |
1359-93 |
20 años |
Bélgica |
2013 |
Figueroa Gómez, Héctor |
453-94 |
20 años |
Bélgica |
2014 |
Maturana Urzúa, Héctor |
453-94 |
20 años |
Bélgica |
2014 |
Marchant Moya, Hugo |
1380- 92 |
25 años |
Finlandia |
2017 |
Araneda Miranda, Carlos |
1384-92 |
25 años |
Bélgica |
2017 |
García Herrera, Carlos |
1380-92 |
40 años |
Bélgica |
2032 |
Fuente: FASIC (Fundación de Ayuda Social de las Iglesias - Chile).
Hay otro grupo de personas que se encuentran fuera de Chile pero tiene su situación procesal pendiente por haberse fugado del penal (enero de 1990). O haber salido en forma irregular para no ser detenidos, por ejemplo: Caso atentado a Pinochet.
...
( 09/2007 ) ---
Hoy día cuando se han cumplido ya 17 años de "gobiernos democráticos" resulta absurdo comprobar que aún existan chilenos condenados al exilio por haber sido castigados con la pena de extrañamiento, que utilizó el primer gobierno de la Concertación para resolver el problema de los Presos Políticos, así como aquellos que el 30 de enero de 1990 optaron por conseguir su libertad fugándose desde la Cárcel Pública.
Es paradójico recordar que la Dictadura Militar puso fin a la prohibición de ingreso al país - luego de 15 años en el poder - y que la "democracia" por falta de voluntad política y decisión frente a los partidos de la oposición no desee resolver este problema que afecta a decenas de chilenos repartidos por todo el mundo. Más aún cuando el Presidente Ricardo Lagos concedió un indulto presidencial a un militar por haber participado en el asesinato del dirigente sindical de Tucapel Jiménez.
¿Será acaso que nuestros gobernantes tienen la memoria corta y quisieran repetir el ejemplo del Padre de la Patria, Bernardo O’Higgins, que murió en el exilió? ¿Será una deshonra para el país permitir el ingreso de los compatriotas que hicieron uso del legítimo derecho a la rebelión y emplearon todas las formas de lucha existentes para terminar con la Dictadura? ¿Será necesario castigar mucho más a los que ya pasaron años en prisión y sufrieron los horrores de la tortura?
En Europa cada año se conmemora el fin de la Segunda Guerra Mundial y quienes abren todos los desfiles son los combatientes de la Resistencia contra la dominación Hitleriana. A ellos se les honra y se les respeta por cada acción que emprendieron con el fin de terminar con la barbarie que fue el Nazismo y nosotros en Chile ¿qué hacemos para honrar la memoria de nuestros caídos y la de aquellos que sobrevivieron a la represión militar?
Para muchos que hoy ocupan sillones parlamentarios o cómodas butacas en los ministerios, los Presos Políticos castigados con el extrañamiento y los fugados, siguen siendo un tema olvidado o una metáfora en la reciente historia nacional.
Para otros quizás, incluso sea el gatillo necesario para terminar de una vez por todas con el problema de los Derechos Humanos y salir del enjambre judicial dictando una ley de Amnistía General para vencidos y vencedores de la guerra que iniciaron las Fuerzas Armadas con el pueblo de Chile.
Sin embargo, para miles de chilenos que dimos la cara en las barricadas, en los paros, tocando cacerolas, que dejamos nuestros mejores años detrás de las rejas dictatoriales, la única solución es que el Cuarto Gobierno de la Concertación, a la cabeza de la señora Michelle Bachelet decrete una ley que ponga fin a las penas de extrañamiento sin ninguna condicionante y otorgue la libertad incondicional para todos los Presos Políticos que hoy día permanecen fugados.
Por el derecho a vivir en Chile
más información: Solidaridad Latino

Plaza Salvador Allende en París, Francia.
( 06/2007 ) --- Una calle, una avenida, una plaza, un parque, un teatro, un centro cultural, una escuela, una sala de espectáculos, un recinto deportivo … que llevan el nombre de Salvador Allende, Pablo Neruda o Víctor Jara, existen en una gran cantidad de países.
En Francia por ejemplo, donde sobrepasan el centenar, en Italia, en España, en México, en Nicaragua, en Venezuela, en Brasil, en Cuba, El Salvador, Perú … En Alemania, Italia, Bélgica, Hungría, Gran Bretaña, Estados Unidos, Canadá, Holanda, Suecia, Portugal, Angola, Mozambique …
Una fotografía de la calle Salvador Allende
Envíenos una o varias fotografías de la calle S. Allende que queda cerca de su casa, en el camino a su trabajo, a su lugar de estudios. O que descubrió durante un paseo.
Agregue una descripción, los datos del lugar, la fecha ...
Una calle Salvador Allende, más información :
http://www.abacq.org/calle/
...
( 01/2007 ) --- Soy diseñadora que nació en dictadura y los felicito porque solo cuando se ve y se entiende el contexto, se puede entender el arte y más aún la gráfica como instrumento de comunicación y arte... Me emocionaron con la exposición
Anahí Saa, Chile.
( 01/2007 ) --- Andaba buscando material de la lucha y trabajo juvenil de los años 68 al 73, para hacer una pequeña exposición/reseña en la parte de la "Memoria Amaranto", de "La fiesta de los abrazos". La "Memoria Amaranto" es un grupo de ex jotosos que buscan recuperar la historia del trabajo de los jóvenes de esa época, sobre todo de los compañeros que fueron asesinados por la dictadura y me encontré con la grata sorpresa de este Portal, que no conocía.
Fue una alegría ver el colorido de los murales y afiches que creo representaban muy bien nuestra alegría de vivir y nuestro compromiso con el gobierno del pueblo, para el pueblo del compañero Salvador Allende.
A propósito la joven que sale en el afiche de Universidad para todos es mi hermana, se llama Nieves Rojas
Cecilia Rojas, Santiago, Chile.
( 01/2007 ) ---
Me han contado que en Nueva York,
en la esquina de la calle veintiséis con Broadway,
en los meses de invierno, hay un hombre todas las noches
que, rogando a los transeúntes,
procura un refugio a los desamparados que allí se reúnen.
Al mundo así no se le cambia,
las relaciones entre los hombres no se hacen mejores.
No es ésta la forma de hacer más corta la era de la explotación.
Pero algunos hombres tienen cama por una noche,
durante toda una noche están resguardados del viento
y la nieve a ellos destinada cae en la calle.
No abandones el libro que te lo dice, hombre.
Algunos hombres tienen cama por una noche,
durante toda una noche están resguardados del viento
y la nieve a ellos destinada cae en la calle.
Pero al mundo así no se le cambia,
las relaciones entre los hombres no se hacen mejores.
No es ésta la forma de hacer más corta la era de la explotación.
Bertolt Brecht. 1931.
( 01/2007) --- Son una vergüenza. Dan asco. No exactamente los pinochetistas, de los cuales cabe esperar homenajes y elegías, sino los otros. Da asco la columna de Pato Navia ponderando en el diario La Tercera la obra refundadora de un dictador cuyos delitos de sangre y venalidad han sido ampliamente acreditados por la justicia internacional. Pero también dan asco los panelistas de Tolerancia Cero que se muestran implacables contra la corrupción de medio pelo, pero que evidencian una tolerancia infinita para referirse a Pinochet con eufemismos y pasitos de esgrima. Dan asco los noticieros, la propaganda militar, el kitsch de la dictadura con sus viejos estandartes, recuerdos, anécdotas de cómo nos enriquecimos mientras una parte de la población permanecía en el exilio, en la cárcel, o atemorizada en sus casas. Así cualquiera cambia el país, Navia; lo cambia y se lo roba. Así cualquiera. Qué vergüenza. El especial de La Segunda a cargo de Gonzalo Vial es un asco de principio a fin. Y los foros, con esos panelistas aterrorizados de llamar dictador a un dictador, ladrón al ladrón, terrorista a un promotor del terrorismo de Estado. Con ecuánimes palomas quieren despedir al que los escupió en la cara.
¿A qué le tendrán miedo? ¿A quedarse sin pega? ¿A perder rating? Son una vergüenza. Dan asco los especiales de prensa que El Mercurio y Copesa echaron a la calle para historiar la muerte del militar más sangriento de la historia de Chile, cómplice en los crímenes de sus propios camaradas de armas y quien celebró como un ahorro fiscal el hallazgo de dos y más cadáveres en un mismo ataúd cuando se revelaron las tumbas clandestinas del régimen. ¿No se darán cuenta que al hacerlo entonan loas al sentimiento de venganza? ¿Qué están promoviendo una justificada patada en el culo cuando no un pistoletazo cada vez que vuelven a humillar a esos familiares con sus crónicas de alabanza? No, tienen que llorar para darse cuenta. Y en la Escuela Militar, ¿acaso todavía no saben leer para informarse de que el último comandante en jefe antes de Pinochet fue Carlos Prats, quien voló por los aires con un bombazo digitado desde Chile? Honores de Comandante en Jefe a un gorila golpista es cosa de asco, de vergüenza, pero así es. ¿Qué país escondido revela la muerte de Pinochet? Da pánico prestar atención a la incapacidad ya no política de los dirigentes concertacionistas, sino simplemente cívica para deslindar el bien del mal, como si no existiesen ya esas categorías: matar empata con modernizar, torturar oponentes empata con exportar manzanas, gobernar por el miedo empata con redactar una nueva Constitución.
¿De qué están hablando estos papeluchos del equilibrio? ¿Qué país es éste que da asco leer la prensa, ver la tele, escuchar la radio? ¿Por qué están todos de acuerdo en respetar la memoria penal de un tirano? Qué asco, qué complejo arrastran para dejarle a la historia, es decir a los otros, un juicio condenatorio que los tribunales escamotearon una vez más, tal cómo Carlos Cerda tuvo de el buen criterio de señalar en medio de la opereta funeraria.
Porque se trata de esto, finalmente. Augusto Pinochet falleció el 10 de diciembre en la más absoluta impunidad penal, y sólo Belisario Velasco, vaya por donde, fue capaz de orientar a la opinión pública de manera sintónica con los sentimientos de la gran mayoría, y si no, al menos con los valores que se supone sostienen a una democracia: respeto a las minorías, libertad de expresión, elección libre e informada, transparencia y probidad en el gasto público. Pinochet repitió de curso en todas estas materias de Estado, pero hete aquí que el burro es homenajeado por testarudo. Vaya democracia la que nos legó el cabrón. Un asco, una vergüenza para todos.
Contra lo que puedan pensar quienes todavía están leyendo esta columna, la muerte de Pinochet no me alivia de nada. La pérdida no de vidas, sino de nociones comunes para entenderse o disentir, es irremontable, tal como lo hemos visto en estos días. Nada nos devolverá lo extraviado bajo la bota. Recuerdo a un amigo que perdió a su padre, fusilado en Calama por la Caravana de la Muerte, y me contó su sentimiento de inutilidad cuando Pinochet quedó preso en Londres. Los oponentes festejaban la medida, intercambiaban mails, alentaban la extradición a España, pero él había quedado frío. Ni la horca que colgó a Mussolini salvaba su distancia. Esto puede ser un argumento para las columnas de Hermógenes a favor de la impunidad, pero no importa: se lo regalo como la muerte del sapo. El resarcimiento es un concepto judicial, no humano. Y el tema de Pinochet, que es el tema del odio en Chile, trata de vidas humanas.
Qué quieren: soy nacido el 57, fui educado en una democracia representativa, mi padre era comunista y me llevaba de la mano el año 63 a ver los actos de Frei Montalva para enseñarme a escuchar opiniones distintas a la suya. A los 15 años se acabó la lección. Pertenezco, según una encuesta publicada recientemente en La Tercera, a ese minoritario 20 % de la población que sabe distinguir entre un dictador y un presidente, un militar y un criminal, un hombre que ladra y otro que piensa, un lamebotas y un liberal. Somos minoría en el país, sin duda. Y a mucho orgullo. Presumo que para esa minoría no es la hora de festejar ni de llorar la muerte de Pinochet. Es la hora del asco, de la vergüenza.
Roberto Brodsky. Chile.