( 10/2001 ) -- Qué decir que no se haya ya dicho. Me sumo a la reflexiones de la gente lúcida y sensata (que por suerte parece que tiende a ir en aumento), que más allá del horror por lo atroz de atentado, está preocupada por el siniestro cariz que está adquiriendo la respuesta del gobierno norteamericano. Con la plena aceptación (complicidad será mejor decir) de la gran mayoría de los gobiernos del mundo. No necesito entrar en explicaciones para que nos entendamos. Es cierto que yo hace tiempo que perdí mis ilusiones sobre el reino de la utopía, pero no me imaginaba que el talón de hierro que imaginaba Jack London, estuviera tan próximo a ser una realidad, y a nivel planetario …
Alfonso. Chile.